“Adios hermoso, me tengo que ir”
Es todo lo que te puedo decir…
Sonríes,
Me miras, diciéndome algo con la mirada
Que no logro decifrar…
Tal vez porque parte de ti, quiere decirlo
Y parte de ti lo quiere ocultar…
O tal vez porque dice lo contrario
A todo lo que últimamente me has hecho pensar…
Me despido con un beso en la mejilla
Y un abrazo,
Mientras me muerdo los labios
Y cierro los ojos
Cerrándome a mis impulsos
Para no demostrar mas
De lo que me permites ya…
Me abrazas fuerte,
Un abrazo que traspasa la piel,
La sangre,
Los huesos…
Un abrazo que toca mi alma
Y que dice mucho más
De lo que quisiera saber
Porque no me dejas sanar,
Porque no logro entender
Que es lo que esperas que haga
Con un abrazo de esos…
Y aún no me sueltas,
Como si tu vida dependiera de ello,
Como si tal vez, al soltarme
Me perdieras por siempre….
Respiro profundo,
Son instantes eternos…
Tan largos y sin embargo,
Sólo segundos efímeros...
Y asi, finalmente nos separamos.
Me miras de nuevo,
Con otra mirada revuelta
Y un “Te quiero”,
Aún más incierto
“Y yo a ti, precioso”, es mi respuesta
Mientras escondo mis ojos,
Y te tiro un beso casual,
Mientras cierro la pesada puerta
Tras de mi…
Y corro al ascensor,
Intentando huir
De esos sentimientos que quisiera
Que hubiera logrado transformar ya…
Pero solo huyo de ti,
Porque por más que los evite,
Ellos, por lo pronto,
Siguen aquí un tiempo más…
