Despedida.

Sólo se ve negro desde arriba...
Sólo negro y una que otra luz
Que me da la despedida.
Varios pedazos de mi
Se quedaron en Medellín,
Y otros tantos, luchan por hacerlo,
Mientras huyen entre lágrimas
Teñidas de pestañina.
Otro parche de luz se destaca desde abajo...
Medellín...
Alcanza a distinguirse el cerro de Nutibara
Y el río con su deslumbrante alumbrado
Y los recuerdos me atrapan de nuevo.
Cada centímetro de Medellín
Guarda un recuerdo.
En cada lugar me entregué un poco
Y fue tanto lo que fui dejando de mí
Que ahora, de vuelta a Cali,
A pesar de que ya mi Valle me llamaba,
Me siento incompleta.
El parche de luz fue devorado por las nubes
Y yo sólo pude soltar un suspiro,
Mientras que las lágrimas fluían,
Y mi labio inferior no paraba de temblar.
Llegué a Medellín con una sonrisa en la cara
Y con el brillo en los ojos...
¿Qué voy a decir ahora,
cuando me pregunten donde dejé
la sonrisa y el brillo?